Nuestro
Panorama
Escaparate
Nos quedamos
esperando
Por: Iván Cruz
H
ace un año hablábamos de la
gran expectativa que existía
por posible aprobación de una
reforma migratoria que sacara de las
sombras a millones de personas que no
cuentan con una residencia legal en el
país.
En repetidas oportunidades
insistimos en que arreglar el sistema
migratorio roto del país es no solo
una necesidad política y social que
ayudaría, además, a reactivar la
economía de Estados Unidos.
Diferentes estudios dan cuenta
de que la aprobación de una reforma
migratoria ayudaría al crecimiento
económico de la nación, ya que los
más de 11 millones de inmigrantes
que se acogerían a ésta pagarán sus
contribuciones fiscales y ayudarán a la
reducción de déficit fiscal.
Se calcula que hasta dos puntos
del Producto Interno Bruto (PIB)
podría recaudar Estados Unidos con
la legalización de estos millones de
migrantes que se mantienen en las
penumbras fiscales.
De igual manera, la legalización
implicaría mejores sueldos para
estos trabajadores y, por ende, más
capacidad de consumo y reactivación
del mercado interno.
El presidente Barack Obama le ha
insistido al Congreso, que apruebe
la reforma migratoria, alegando que
recortaría el déficit e impulsaría
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| Enero/Febrero 2014
el crecimiento económico. Pero la
Cámara de Representantes, controlada
por republicanos, se ha negado a
aprobar el proyecto de ley bipartidista
surgido del Senado que propone
reforzar la seguridad fronteriza al
tiempo que dar una vía a la ciudadanía
a los 11 millones de inmigrantes
ilegales.
De acuerdo con un informe
divulgado por el gobierno, el proyecto
de ley podría generar un crecimiento
de la economía de un 5.4 por ciento en
dos décadas y reducir la deuda federal
en 3 por ciento en 2023.
Mientras el Congreso sigue
enfrascado en la discusión de este
proyecto, en el cual las diferencias
políticas impiden llegar a un consenso,
millones de personas esperan que se
llegue a un acuerdo. Las empresas
más grandes saben de la necesidad de
reformar el sistema migratorio porque
se conocen ampliamente la capacidad
de gasto de los inmigrantes que
alcanzará muy pronto los 1.5 billones
de dólares.
Esperamos que los políticos, y en
especial el presidente Obama, cumplan
con su promesa de impulsar la reforma,
que sin duda, traerá más prosperidad
para todos.
Abastoonline.com